08 Mar
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 Las mujeres en el arte, a lo largo de la historia, han sido invisibilizadas, o se les ha atribuido un papel pasivo, considerándose principalmente musas, objetos de inspiración, pero pocas veces agentes de acción y creación.

Afortunadamente, nuevas aproximaciones a la historia muestran que las mujeres siempre han estado activas en las artes. Tal es el caso de las Galerías en México, las cuales desde su nacimiento y hasta hoy son impulsadas y sostenidas, de manera importante, por mujeres. Las galerías, al ser espacios para la venta de obra, promover el coleccionismo y exhibir el trabajo de diferentes creadores, movilizan el mercado del arte y la economía cultural de nuestro país, labor en la que el trabajo y visión de las mujeres galeristas ha sido y continúa siendo esencial.


El surgimiento de las galerías en nuestro país se remonta a la década de los años 30 del siglo XX. Su nacimiento está relacionado con una generación de artistas que, al ser más experimentales, rompieron con la pintura tradicional, por lo que necesitaban nuevos espacios de exhibición para sus obras, es decir, otros sitios que no fueran los grandes museos oficiales. Las galerías, como innovadores espacios de circulación del arte, fueron fundadas por personas conocedoras, amantes y promotoras de las artes, abiertas a otros lenguajes, buenas gestoras y administradoras; razón por la que, no es de extrañar, que el origen de las galerías en México sea femenino.

La aparición de una de las primeras galerías tuvo lugar en 1935 con la creación de la Galería de Arte Mexicano (GAM) en la Ciudad de México, fundada por Carolina Amor y dirigida posteriormente por su hermana Inés Amor. En este espacio expusieron artistas importantes como el pintor Rufino Tamayo, cuya carrera contó con el impulso de su esposa y, digamos, galerista personal Olga Flores Rivas. Mujer a la que en aquella época llamaron “malévola, por comerciar con la obra de su marido, elevar los precios y regañarlo si bajaba el valor a sus cuadros”. En realidad, era una mujer directa que reconocía y defendía el valor creativo y económico del trabajo artístico. Históricamente tampoco se puede dejar de mencionar a la Galería Pecanins, fundada en 1964 por Teresa y Ana María Pecanins.

Las galerías no son sólo lugares en los que se vende y compra arte, son espacios de encuentro y gozo entre gente que busca una experiencia más íntima y cercana con las obras de arte y sus creadores(as). Detrás de ellas, guiadas por una mirada sensible, pero también profesional y emprendedora, encontramos en el México contemporáneo mujeres que han fundado y/o dirigen importantes galerías, como Nina Menocal, Pamela Echeverría (Galería Labor), Patricia Ortiz Monasterio (OMR Galería), Mónica Manzutto (Galería Kurimanzutto), Karen Huber, Carmen Rosa Vega (NM Galería), por mencionar algunas. Grandes propuestas que hay que conocer, por lo que no dudes en viajar para visitarlas. Puedes encontrar su programación, horarios y ubicación en el siguiente link: https://galeriasmx.com/

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